viernes, 6 de abril de 2012

Ella

Una noche más rondando por este  amargo hospital, agonizando por verla sufrir en esa camilla con todos aquellos tubos por su cuerpo, medio moribunda con un pie aquí y allá, y con la esperanza a que despierte y me diga no pienso irme, me quedaré aquí. No tengo fuerzas para poder aguantar esto otra vez, quiero alejarme, pero no puedo, es mi realidad, mi destino y debo hacerme a la idea de que no puedo huir de él.
 Odio cada día que paso en este lugar, lleno de dolor, agonía, sufrimiento, tristeza y falsas esperanzas. Su cuerpo pálido y sin fuerza, me dice que no aguantará otra noche más. La estoy observando y de repente empieza a tener un ataque, los médicos entran a toda prisa a la habitación, con todos aquellos aparatos con el fin de reanimarla, pero nada de eso merece la pena, porque ya llegó su hora.
Su pequeño ser interior sale de su cuerpo y contempla su alrededor con una mirada confusa, me mira y ya entiende lo que sucede. Y esta es la parte que más odio de este trabajo, porque cada alma que me llevo me ata más al infierno.

2 comentarios:

  1. Desde que lo leí me gustó, y cuanto más lo leo más me gusta *_* me encanta... el punto de vista de la muerte al tener que llevarse a cada alma que abandona su cuerpo...

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  2. No sé si ya te lo había dicho, pero me encanta ^^



    Foo

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